Calzado
Disponer de ropa de seguridad laboral es imprescindible para realizar determinados trabajos que están expuestos a riesgos específicos. Además de estas prendas, también tienen especial importancia los equipos de protección individual, comúnmente conocidos como EPIs por sus siglas. Para que sean eficaces, todos estos componentes deben estar en perfecto estado y de eso vamos a hablar en este artículo. ¡No te lo pierdas!
El mantenimiento de los EPIs, aspecto clave de la seguridad de los trabajadores
Cualquier traje EPI o accesorio de protección está diseñado para poder resguardar al trabajador que lo usa. Si te dedicas a una industria peligrosa, sabrás perfectamente de lo que hablamos: ropa ignífuga y antiestática, guantes, cascos y zapatos de seguridad, entre otros accesorios.
Desde luego, adquirirlos y utilizarlos es clave, pero no lo único en lo que hay que pensar cuando hablamos de protección. El mantenimiento se vuelve indispensable para garantizar la eficacia de este tipo de elementos y te recomendamos estar al tanto de ello.
Y es que, de nada sirve ponerte unos guantes para manipular alguna sustancia corrosiva si no están en buenas condiciones, por poner un ejemplo. Por eso, resulta tan importante llevar un exhaustivo control al respecto. Recuerda que garantizar la seguridad de los trabajadores es una de las principales tareas de los empleadores.
Además, se trata también de un tema legal. Así se recoge en la Ley 31/1995, de Prevención de Riesgos Laborales. En el artículo 17.2 establece que «el empresario deberá proporcionar a sus trabajadores equipos de protección individual adecuados para el desempeño de sus funciones y velar por el uso efectivo de los mismos cuando, por la naturaleza de los trabajos realizados, sean necesarios».
De igual forma, en el 17.1 se explica que «el empresario adoptará las medidas necesarias con el fin de que los equipos de trabajo sean adecuados para el trabajo que deba realizarse y convenientemente adaptados a tal efecto, de forma que garanticen la seguridad y la salud de los trabajadores al utilizarlos».
¿Los equipos de protección tienen fecha de caducidad?
Ahora que ya eres más consciente de la importancia que tiene contar con equipos óptimos, la pregunta lógica es ¿cuándo debemos renovarlos? En este sentido, parece obvio que se deben sustituir cuando presenten algún desperfecto. No obstante, antes es preciso abordar el tema de la vida útil de los mismos.
¿Los EPIs tienen fecha de caducidad? Sí. De hecho, los fabricantes de este tipo de productos han de encargarse de detallar convenientemente esta información. El artículo 41 de la citada ley recoge las obligaciones a cumplir al respecto. En líneas generales, se habla de una serie de recomendaciones o requisitos que se deben ejecutar, pero no hay una normativa concreta sobre cuánto deben durar los equipos de protección.
¿Cuándo se deben renovar?
Como podrás adivinar, cada uno de estos elementos es un mundo, de ahí nuestra recomendación de leer la información que proporcione el fabricante. No obstante, aquí tienes una pequeña lista que te puede servir de guía para tu negocio.
- Calzado de seguridad
Cuando hablamos de calzado de seguridad, lo que se aconseja es cambiarlo cada año. En cualquier caso, todo depende principalmente del cuidado que se haga y cuáles sean las condiciones de uso. Ten en cuenta lo siguiente: que la suela no haya perdido resistencia a la corrosión, que el calzado siga aguantando las abrasiones y protegiendo el pie mientras se usa. Si presentan grietas, agujeros o desgaste, necesita una sustitución inminente.
- Guantes
La renovación de este accesorio dependerá de si conserva o no sus propiedades. Debes saber que existen condiciones higiénicas, ambientales o de utilización que pueden afectar negativamente la función protectora que poseen. En este sentido, es muy importante, por ejemplo, seguir las instrucciones del fabricante para poder lavarlos adecuadamente.
- Casco
Seguro que, cuando piensas en un EPI, el casco es lo primero que se te viene a la mente. Y es que, es una de las piezas fundamentales en trabajos como la construcción. El casco protege una de las partes más sensibles de nuestro cuerpo, por lo que resulta esencial que siempre esté en las mejores condiciones.
El envejecimiento y el deterioro son los principales aspectos que influyen en el estado del mismo. Sus funciones se pueden ver alteradas, no solo con el paso del tiempo, sino por las condiciones ambientales o utilizarlo a la intemperie. Como en todo, un correcto mantenimiento hará que su vida útil se alargue y, por tanto, nos dure mucho más tiempo. Por supuesto, ten en cuenta que si recibe un golpe considerable, será preciso cambiarlo de inmediato, ya que la protección ofrecida en futuros accidentes no será tan efectiva.
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